Los familiares de los tripulantes del ARA San Juan responden de manera similar ante la consulta que por separado les hace LA NACION: nadie quiere hablar demasiado sobre los reembolsos económicos que deben recibir por la desaparición de las víctimas. Temen que dedicarle a ese tema más que unas pocas palabras pueda desviar la atención -la propia y la del Estado- de la búsqueda del submarino, que sigue siendo su objetivo sobresaliente.
Si en algún momento deciden comenzar a tratar las cuestiones materiales, la mayoría se encontrará con resultados magros, a menos que el Estado avance en compensaciones que hoy se están discutiendo en distintos niveles de la Armada y el Gobierno, pero que no están aún definidas, o inicien juicios contra el Estado.
Aunque el episodio del ARA San Juan dejó en evidencia que la tarea de los submarinistas es altamente riesgosa, en la gran mayoría de los casos los tripulantes tenían seguros de vida por debajo de los $50.000, según datos de la Dirección General de Salud y Acción Social de la Armada, mediante un pedido de acceso a la información pública remitido al Ministerio de Defensa y respondido con fecha del 31 de enero de este año.
De los 44 tripulantes de la nave, 32 tenían las coberturas básicas, que implican un seguro de sepelio y un seguro social obligatorio. De manera que sus familias recibirán dos ítems: uno de $3800 y otro de $44.330. En total, suman $48.130.
Entre ellos está Hernán Ramón Rodríguez, suboficial primero maquinista del ARA San Juan. Su mujer, Marcela Moyano, asegura que no está en tema. «No me enteré de nada. Hoy mi cabeza está en otra cosa. Me interesa que sigan con la búsqueda, que los encuentren», sostuvo.
Malvina Vallejos, hermana de Celso Vallejos, suboficial segundo y sonarista, tiene más información, pero el mismo escaso interés. «Sabemos que hay seguros y mi hermano tenía todo en regla. Pero a mí no me importa ese dinero. No representa lo que vale [Celso] ni me lo va a devolver. Es para mi cuñada y las nenas», dice escueta, y apunta la conversación al tema que más le importa. «Creamos dos cuentas bancarias para traer tecnología de afuera, una en pesos y otra en dólares. Hay 40 millones de argentinos», difunde su mensaje.
El seguro básico es obligatorio por ley. La Armada los contrata a través de La Caja. Es una suma fija igual para todos, que no depende de la jerarquía. Los familiares podrán cobrar ese dinero recién cuando se cumplan seis meses legales de fallecimiento por presunción de accidente, algo que ocurrirá en mayo próximo.
Fuente: lanacion.com